Al producirse un disparo, los componentes de la pólvora (gases, partículas quemadas o no quemadas), se desprenden como resultado de la deflagración y se adhieren a las partes internas y/o externas del vehículo o cualquier otra superficie que se encuentre cercana a los conos de dispersión. Dichos componentes son analizados con la utilización de diferentes reactivos y técnicas.
Se realiza la colección en las superficies objeto de estudio mediante macerados con hisopos, luego, se
procede al análisis de los mencionados macerados mediante pruebas colorimétricas y técnicas cromatográficas con la finalidad de obtener la identificación química de los componentes de la pólvora.